– DEBEN SER IRREPRENSIBLES [Si no lo son, si no tienen un buen testimonio por los que están fuera, si han cometido pecados graves, como la fornicación y el adulterio, es mejor que no les sigan y no les escuchen, porque no han sido irreprensibles y ya no tienen una buena reputación.
– NO DEBEN SER SOBERBIOS [Todos somos hijos de Dios, salvos por gracia, todos somos hermanos en Cristo nosotros que hemos sido regenerados espiritualmente, entonces ¿por qué los conductores deben erigirse? ¿Qué tienen que no hayan recibido de Dios? ¿Por qué deben creer que sean superiores a los demás? ¿Por qué desprecian a los pobres? El orgullo de la vida es algo que a Dios no le agrada, y con el tiempo humillará a los arrogantes y a los altivos]
– NO DEBEN SER IRACUNDOS [los conductores no pueden dejarse ir a la cólera, enojarse por poco, de hecho, deben ser mansos y humildes de corazón, como lo fue Jesucristo]
– NO DEBEN SER DADOS AL VINO, NI A ORGÍAS [Los conductores deben ser moderados en todo, incluso en el comer y beber, deben ser un ejemplo en todo, incluso en la mesa]
– NO DEBEN SER PENDECIEROS [Ellos no deben usar sus manos, ni pelear con nadie, porque la violencia está prohibida, y el conductor debe ser un ejemplo en todas las cosas. Deben en cambio soportar, en lugar de responder con violencia, incluso si han sido tratados injustamente]
– NO DEBEN AMAR AL DINERO [no deben siempre estar allí desde el púlpito a pedir dinero a los hermanos, porque si lo hacen, es evidente que en el corazón tienen el dinero, eso es lo que quieren y por lo tanto lo exigen continuamente. Quien ama el dinero es un siervo de Mammon en lugar de Dios]
– DEBEN SER HOSPEDADORES [Los conductores, los ministros y los ancianos, deben ser un ejemplo también en la hospitalidad, por lo tanto deben invitar constantemente a los hermanos, tanto para conocerlos mejor como para cuidarlos personalmente, y porque de esta manera se les enseña como se debe practicar la hospitalidad]
– DEBEN SER AMANTES DE LO BUENO [Si el conductor debe amar el bien, significa que debe aborrecer el mal, entonces debe reprender la maldad, la falsedad, la hipocresía, se debe ver que él lucha por el bien y la verdad, y que está en contra de las mentiras y falsedades y la hipocresía. Si no odian el mal y no luchan contra él, pero están en silencio, incluso cubren el mal que muchas personas hacen, entonces pongan mucho cuidado, no están en presencia de un siervo de Dios, sino del diablo, que trata de ocultar el mal]
– DEBEN SER SENSATOS [los conductores deben ser un ejemplo para el rebaño de Dios incluso en la sabiduría, en el caminar y en el hablar con gravedad e inteligencia. Pero si sus líderes están desprovistos de inteligencia, no entienden lo que dicen y lo que hacen, ¿cómo podrán encontrar la solución correcta en el Señor por todo lo que pasa en la Iglesia? No pueden, porque son, de hecho, faltos de entendimiento]
– DEBEN SER JUSTOS [Ellos no deben tratar a las personas con parcialidad, los ricos no son más importantes que los pobres, no se puede tratar bien a los ricos, y maltratar a los pobres. No se debe actuar para los intereses monetarios y conveniencia personal. El justo reprende al impío y encomia a los que se santifican y hacen buenas obras. Pero hoy estamos viendo que en las comunidades abundan los conductores que reprenden y desalentan a los que se santifican y quieren crecer espiritualmente, y fomentan y fortalecen los brazos de los impíos]
– DEBEN SER SANTOS [Primeramente los conductores deben ser salvos, por lo tanto deben ser salvados y santificados por Cristo Jesús; en segundo lugar, deben seguir permaneciendo santos, separados del mundo, y no deben vivir entregándose a la concupiscencia de la carne y los placeres de la vida. Si los conductores no se santifican y se dan a los placeres de la vida, imagínense de lo que van a hacer las ovejas del Señor que ellos guían]
– DEBEN SER DISCIPLINADOS [En cada cosa deben tener un auto-control completo, no deben darse a ningun exceso, más deben ser moderados en todas las cosas. Esto también es un fruto del Espíritu Santo, si no se manifiesta, y si no son un ejemplo de templanza, entonces ustedes están corriendo un grave peligro. Tengan cuidado con estas personas y todos aquellos que no tienen las características que deben tener, como se dice en la Biblia]
– DEBEN APEGARSE A LA PALABRA FIEL QUE HAN ENSEÑADO LOS APÓSTOLES Y JESÚS [No deben demostrar que están apegados a sus estatutos y reglamentos, sino que deben predicar la Palabra, deben creer en la Palabra de Dios, y defenderla contra todo lo que va en contra de la Palabra. Aquel que cree que la Biblia es REALMENTE la Palabra de Dios, se apegará a ella, no se desviará de ella por ninguna razón. Pero si uno no cree que es la Palabra de Dios, entonces anulará los mandamientos, los cuales están escritos en ella y la despreciará con sus falsas enseñanzas y su conducta rebelde]
– DEBEN SER CAPACES DE EXHORTAR A LOS DEMÁS CON LA SANA DOCTRINA [Ellos deben ser capaces de mover los corazones de los hermanos, deben exhortar con la sana doctrina de la Palabra, deben enseñar a las ovejas del Señor a obedecer todos los mandamientos escritos en la Palabra. Pero antes de exhortar a los demás y reprender y amonestar a los desordenados, deben ser fervientes y fieles hacedores de Palabra de Dios. Si ellos no practican primeros la palabra de Dios, ¿cómo podrán exhortar a los demás para que se adhieran estrictamente a ella y obedezcan los mandamientos de Dios? No podrán, y los hermanos se extraviarán en su conducta de la verdad de la Palabra]
– DEBEN SER CAPACES DE CONVENCER A LOS QUE CONTRADICEN [Las Iglesias están llenas de personas que contienden y que se rebelan contra los mandamientos de Dios, porque no quieren atenerse a ellos y quieren sentirse libres de hacer lo que les gusta. No, esto no es posible, y los ancianos y los ministros de Dios son puestos en la Iglesia precisamente para demostrar bíblicamente a los que contradicen que se equivocan y que deben atenerse a la verdad de la Palabra de Dios. Sin embargo, esta es una característica CASI COMPLETAMENTE AUSENTE en las diversas iglesias porque los conductores son ignorantes en el conocimiento de las Escrituras, y ni siquiera pueden probar las doctrinas fundamentales a los católicos y a los testigos de Jehová, utilizando sólo la Palabra de Dios. Sin prepararse el discurso con un pedazo de papel, sin llegar a la intervención de los demás, no son capaces de demostrar nada. Su ignorancia en el conocimiento de las Sagradas Escrituras es a veces abismal, algo que incluso algunos creyentes recién convertidos que leen la Biblia desde pocos meses pueden notarlo. También estas capacidades vienen de Dios y si no las manifiestan, significa que Dios no se les ha dado, entonces, no pongan su confianza en ellos]
– DEBEN SER MARIDOS DE UNA SOLA MUJER [Hermanos en el Señor, esta característica es importante para un conductor, para un anciano, para un ministro de Dios, de hecho, Dios ha establecido que sus siervos tengan una sola esposa, por lo tanto, no deben ser divorciados y recasados. Tengan cuidado con los que les digan lo contrario, porque las Escrituras son claras en este tema. Mejor creer y atenerse a lo que la Biblia dice en lugar de escuchar a los engañadores y el espíritu de error]
– DEBEN SER DECOROSOS [los conductores deben comportarse de una manera conveniente en todo, sin costumbres y formas de vida y hábitos que pueden ser vistos como extraños o extravagantes. El vestido es importante, siempre deben estar vestidos y no desnudos o vestidos de manera impropia e insensata]
– DEBEN SER APTOS PARA ENSEÑAR [Esta característica de los conductores y de los ancianos es fundamental, de hecho, un pastor, o un anciano, que no es capaz de enseñar, que no es capaz de transmitir una enseñanza, una doctrina a los miembros de la comunidad, significa que no puede ser considerado anciano o pastor. Cuando el Espíritu Santo establece los ancianos en medio de la Iglesia, les dará la capacidad de enseñar, de transmitir el conocimiento de la verdad de la Palabra a los santos, pero si no tienen esta capacidad, entonces no pueden absolutamente asumir el cargo de ancianos, ni de pastores. No es suficiente tener la tarjeta de pastor en el bolsillo para ser pastor de una comunidad de Cristo, sino que se debe tener la Palabra de Dios en el corazón y en la mente, y también se debe tener la capacidad de transmitir a los demás el misterio de Cristo y todas las demás verdades doctrinales de la Biblia, si no todas, al menos las principales]
– DEBEN SER AMABLES [Jesús fue manso y humilde de corazón, y así deben ser también sus ministros]
– DEBEN GOBERNAR BIEN SU FAMILIA [Desdichadamente, hay muchos pastores y ancianos de las varias comunidades que tampoco saben gobernar su propia casa, ni siquiera sus esposas están subordinadas a ellos, imagínense por lo tanto si podrán gobernar la Iglesia y recibir el respeto y la obediencia de los miembros de la comunidad. Comiencen a reprender y someter a su esposa y sus hijos, y sólo entonces podrán presentarse para gobernar la Iglesia de Cristo]
– NO DEBEN SER RECIÉN CONVERTIDOS [es bueno que los ancianos no sean recién convertidos, no sean ni joven de edad ni de conversión. Esto porque es necesario que los ancianos tengan experiencia, tanto de las cosas de la vida en general, como en lo referente a la fe en Cristo y la Palabra de Dios. Un conductor de comunidad que es joven, es probable que caiga en el orgullo, y por lo tanto será condenado como fue condenado el diablo, por su orgullo]
Todas estas cosas se enseñaron y se impusieron por el apóstol Pablo a Timoteo y Tito, para que les tuviesen en cuenta en el gobierno de las Iglesias de Cristo, y para elegir a los ancianos, como leemos en estos pasajes bíblicos:
– Tito 1:7-9 y 1 Timoteo 3:1-7.
Que Dios bendiga a su pueblo y establezca para cada comunidad ancianos y ministros de acuerdo a su voluntad.
Por el hermano en Cristo Jesús: Giuseppe Piredda
Traducido por Enrico Maria Palumbo