No temas


«No temáis, manada pequeña, porque a vuestro Padre le ha placido daros el reino» (Lucas 12:32)

No temas cuando sientes que las cosas van de mal en peor; no temas cuando todo el mundo dice que el futuro es incierto y nadie sabe lo que podría suceder; no temas cuando la comida en tu mesa empieza a escasear; no temas cuando todos los del mundo se burlan de ti y te insultan y te dejan sólo; no temas cuando la gente del mundo habla mal de ti y se aparta de ti; NO TEMAS, porque todo lo que te pasará en esta tierra, todo lo que sufrirás y aprenderás aquí, serán las cosas necesarias que tendrás que aprender y vivir para ENTRAR en el Reino de los cielos, que el SEÑOR ha preparado también para ti, si es que un día has nacido de nuevo y tus pecados han sido perdonados.

No temas, por lo tanto, las malas noticias que llegan a tus oídos de todos los lados, porque TU DIOS, el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, el DIOS Todopoderoso que está en control de todo en Su creación, TE HA HECHO SU HIJO, entonces, Él cuidará de ti, en todas las cosas, porque Él no se olvida de ninguno de sus hijos, de ninguno!!

No temas, porque todo lo que odias, todo lo que sucede, servirá para hacer llegar ese día, ese momento PARA HACERTE ENTRAR EN EL REINO CELESTIAL, en paz y ALEGRÍA.

No temas, hermano, no temas, sólo cree en Dios y en su Palabra.

Por el hermano en Cristo Jesús: Giuseppe Piredda

Traducido por Enrico Maria Palumbo

Pedro cita la ley de Moisés para exhortarnos a santificarnos


10616562_10202811772031263_970556407031583634_nEl apóstol Pedro, para exhortar a los santos a procurar la santificación ha citado la ley de Moisés, de hecho, nos dice: «Como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia; sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir; porque ESCRITO ESTÁ: SED SANTOS, PORQUE YO SOY SANTO» (1 Pedro 1:14-16). Las palabras que cita están escritas en el libro de Levítico donde está escrito: «PORQUE YO SOY JEHOVÁ VUESTRO DIOS; VOSOTROS POR TANTO OS SANTIFICARÉIS, Y SERÉIS SANTOS, PORQUE YO SOY SANTO» (Levítico 11:44). Esto confirma que la ley puede ser utilizada bajo la gracia, sólo hay que hacerlo legítimamente en defensa de la sana doctrina, como lo hacían los santos apóstoles (1 Timoteo 1:8), quienes, de hecho, reconocían que la ley fue dada para cuanto se oponga a la sana doctrina (1 Timoteo 1:10). Pero ellos enseñaban la sana doctrina y la defendían, a diferencia de los malvados que han convertido en libertinaje la gracia de nuestro Dios, y usan la libertad como ocasión para la carne, y por esta razón que desprecian y rechazan la sana doctrina que enseñaban los apóstoles.
Por lo tanto, miren por ustedes, hermanos, velen y oren, para no dejarse seducir por estos hombres corruptos y réprobos en cuanto a la fe que se han insinuado en medio de la Iglesia.

Quien tiene oídos para oír, oiga

Por el maestro de la Palabra de Dios: Giacinto Butindaro

Traducido por Enrico Maria Palumbo

Escritos – libro que contiene enseñanzas y exhortaciones


Este es un libro que contiene enseñanzas y exhortaciones, meditaciones, confutaciones, preguntas y respuestas, y algunos mensajes para los pecadores, en ESPAÑOL, y confío en el Señor que será útil para todos los que conocen y aman la verdad que es en Cristo Jesús.

A Dios sea la gloria en Cristo Jesús ahora y por los siglos. Amén

Para descargar el libro, haga clic aquí:

giacinto-butindaro-escritos

O:

http://spagnolo.lanuovavia.org/giacinto-butindaro-escritos.pdf?fbclid=IwAR3Cr0HBugpU0Y9GlvAS7rerG9Ahp2ev3lRmtoiZzE89rQBve_Fhmc9xSko

 

Giacinto Butindaro

Cristianos que buscan la perfección


perfeccion¡Cuántas veces me han dicho: «¡Usted nunca encontrará Cristianos perfectos!» A lo que yo siempre he respondido: «De hecho no busco hermanos perfectos, sino hermanos que buscan la perfección» – porque eso es lo que los discípulos de Cristo deben hacer, como está escrito: «perfeccionaos» (2 Corintios 13:11) – que es muy diferente. El problema hoy es precisamente esto, encontrar hermanos que buscan la perfección, ya que en la gran mayoría de las iglesias está ausente la búsqueda de la perfección porque la santificación es despreciada y pisoteada. Muchos sermones y enseñanzas que se sienten de los púlpitos de hecho se proponen de una manera u otra justificar, aprobar y promover el mal, y por lo tanto defender y animar a los que se complacen en el mal más que en el bien. Sin embargo, todavía existen los que buscan la perfección, porque Dios todavía tiene un remanente de almas que Le teme y tiembla ante Él.

Los que se niegan a buscar la perfección, entonces nos dicen: «¡Miren a Jesús, Él es el único perfecto!» Como decir en resumen: «¡No miren a las faltas de los hombres! Donde ‘faltas’ significan sus falsas doctrinas, sus escándalos, sus obras impías, sus fraudes, y otras cosas similares. Entonces nos respondemos que, de hecho, sólo miramos a Él, y por eso buscamos la perfección como nos ordena hacer la Palabra de Dios. Y al hacer esto, es inevitable que nos retiremos y separemos de todos aquellos que SE NIEGAN A BUSCAR LA PERFECCIÓN porque no quieren mirar a Jesús: no de aquellos que son imperfectos, porque ninguno de nosotros ha llegado a la perfección, sino de aquellos que desprecian la búsqueda de la perfección ya que se complacen en el mal y la falsedad habiendo cambiado la gracia en libertinaje y por lo tanto con sus conductas impías hacen culpar a la doctrina de Dios y blasfemar al nombre de Dios. No queremos tener nada en común con ellos, porque son propagadores de herejías y escándalos, y les refutamos advirtiendo públicamente a los santos. Esto es lo que también harían los apóstoles si estuvieran vivos.

Por el maestro de la Palabra de Dios: Giacinto Butindaro

Traducido por Enrico Maria Palumbo

La religión universal a la que los Masones quieren que todos los hombres se adhieran


masones religio universal1La Masonería quiere unir todas las religiones, de hecho, en las Constituciones de los Masones de 1723 (es decir, las Constituciones de Anderson de 1723) se lee claramente:

«Un masón está obligado por su mandato, a obedecer la ley moral; y si entiende correctamente el Arte, nunca será un estúpido ateo ni un libertino irreligioso. Sin embargo, aunque en los tiempos antiguos los masones estaban obligados en todos los países para ser de la religión de ese país o nación, fuera lo que fuera, ahora se cree que sea más conveniente obligarlos solamente a esa Religión en la que todos los hombres están de acuerdo, dejando a ellos sus opiniones particulares; es decir, ser hombres buenos y verdaderos, u hombres de honor y honestidad, cualquiera que sean las denominaciones o creencias que los puedan distinguir; entonces la Masonería se convierte en el Centro de la Unión, y el medio de conciliar la verdadera amistad entre las personas que habrían permanecido perpetuamente distantes». Esa religión en la que todos los hombres están de acuerdo, es la religión universal. De hecho, Leemos más adelante: «Por lo tanto, ni resentimientos o cuestiones personales se pueden introducir por la puerta de la Logia, y mucho menos cualquier cuestión relacionada con la Religión o las Naciones o la política del Estado, porque nosotros, como Masones, pertenecemos a la antes mencionada Religión Universal».

El «Sumo Pontífice» de la Masonería universal Albert Pike (1809-1891) – masón de grado 33, Soberano Gran Comendador del Supremo Consejo del Rito Escocés Antiguo y Aceptado de la Jurisdicción Sur de los Estados Unidos a partir de 1859 hasta su muerte – en su libro Moral y Dogma, que se considera ‘La Biblia del Rito Escocés’ ‘cuya lectura y el estudio del cual es indispensable para aquellos que quieren ser un Maestro de Arte Real en el sentido más verdadero y profundo’ (Introducción de Elvio Sciubba en Albert Pike, Moral y Dogma, italian Edition, Bastogi Ediciones, Foggia 2004, Vol. 1, p. 17), lo ha confirmado afirmando que la misión de la Masonería es invitar a “todas las personas de todas las religiones para que se reúnan, bajo su bandera [Libertad, Igualdad y Fraternidad], en la guerra contra el mal, la ignorancia y la injusticia”(Albert Pike, Moral y Dogma, italiano Edición, Vol 2, p 289-18 ° Príncipe Rosacruz..); y le hizo eco el masón Foster Bailey (1888-1977) – Masón de grado 32 del Rito Escocés Antiguo y Aceptado que era el marido de Alice Bailey (1880-1949), una famosa bruja y espiritista de la Nueva Era – diciendo que el Masonería “fue la primera Religión Mundial Unida. Luego vino la época de la separación de muchas religiones y del sectarismo. Hoy estamos trabajando nuevamente para establecer una Religión Universal Mundial” (Foster Bailey, El Espíritu de la Masonería, p. 31).

Alerta máxima, por lo tanto, debido a que los Masones que están presentes en las Iglesias empujan precisamente en la dirección de la formación de una religión universal en la que todos los hombres están de acuerdo.

Rechacen, entonces, tanto el ecumenismo como el diálogo interreligioso, porque son las herramientas que los masones están utilizando para obligar los Cristianos a adherir a la religión universal que ellos quieren crear a nivel mundial.

Mantengan, por lo tanto, siempre ante sus ojos, estos mandamientos del apóstol Pablo para no caer en esta trampa diabólica llamada ‘Religión Universal’:

“No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas? ¿Y qué concordia Cristo con Belial? ¿O qué parte el creyente con el incrédulo? ¿Y qué acuerdo hay entre el templo de Dios y los ídolos? Porque vosotros sois el templo del Dios viviente, como Dios dijo: habitaré y andaré entre ellos, y seré su Dios, y ellos serán mi pueblo. Por lo cual, salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor, y no toquéis lo inmundo; y yo os recibiré, y seré para vosotros por Padre, y vosotros me seréis hijos e hijas, dice el Señor Todopoderoso” (2 Corintios 6:14-18).

Quien tiene oídos para oír, oiga

Por el maestro de la Palabra de Dios: Giacinto Butindaro

Traducido por Enrico Maria Palumbo

Pero con respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo, y nuestra reunión con Él …


rapto no existe1«Pero con respecto a LA VENIDA DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO, Y NUESTRA REUNIÓN CON ÉL, os rogamos, hermanos, que no os dejéis mover fácilmente de vuestro modo de pensar, ni os conturbéis, ni por espíritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera nuestra, en el sentido de que El DÍA DEL SEÑOR está cerca…porque NO VENDRÁ antes que……» (2 Tesalonicenses 2:1-3).

El apóstol Pablo dice que en el DÍA DEL SEÑOR ocurrirán dos acontecimientos, es decir, LA VENIDA DEL SEÑOR Y NUESTRA REUNIÓN CON ÉL. Nuestra reunión con el Señor Jesucristo en el aire se describe también en 1 Tesalonicenses 4:14-17 y en 1 Corintios 15:51-52. Pablo llama este glorioso evento que todos nosotros esperamos, NUESTRA REUNIÓN CON ÉL, sin embargo, hoy en día es llamado por la mayoría de los Cristianos, RAPTO o ARREBATAMIENTO DE LA IGLESIA.

Por las Palabras de Pablo, entonces, entendemos que el arrebatamiento (nuestra reunión con Él) y Su VENIDA ocurrirán en un mismo día llamado EL DÍA DEL SEÑOR.

Después de haber aclarado este punto, vamos a ver si el día del Señor (VENIDA y ARREBATAMIENTO) VENDRÁ antes, durante o después de la gran tribulación.

En el versículo 8 el apóstol lo aclara de una manera IRREFUTABLE: «Y entonces será manifestado aquel inicuo, al cual el Señor matará con el espíritu de su boca, y DESTRUIRÁ CON EL RESPLANDOR DE SU VENIDA» (2 Tesalonicenses 2:8). ¿Han notado hermanos? ¿Han notado que el anticristo será destruido por Jesús CON EL RESPLANDOR DE SU VENIDA? Por lo tanto, si el anticristo que reinará por cuarenta y dos meses (Apocalipsis 13:5) durante la gran tribulación, será destruido en la venida del Señor, y la VENIDA DEL SEÑOR ocurrirá EN EL MÍSMO DÍA de nuestra REUNIÓN CON ÉL, podemos afirmar CON CERTEZA que el arrebatamiento de la Iglesia ocurrirá después de la tribulación, más precisamente INMEDIATAMENTE DESPUÉS de la tribulación de aquellos días (Véase Mateo 24:29-31), cuando, después de ser arrebatados para RECIBIR a Jesús en el aire, descenderemos con Él en la tierra y el anticristo será destruido con el RESPLANDOR DE SU VENIDA. De LA VENIDA de Jesús en la tierra.

Hermanos y hermanas en El Señor, la mayoría de los evangélicos creen que la VENIDA DE CRISTO esté dividida en dos etapas y que, en la primera, Jesús llegará secretamente para Su Iglesia y, tal vez ustedes que leen están entre aquellos que han sido instruidos desde la niñez o desde su conversión que haya este supuesto rapto secreto. Además, por lo que puedo ver con mis ojos, hay muchos creyentes sinceros que se santifican en el temor de Dios, que son verdaderos hermanos en Cristo que pelean la buena batalla contra las fuerzas del mal por medio de la santificación, la oración, el ayuno y la exhortación, sin embargo, por otra parte veo también que han DEJADO ATRÁS esta parte tan importante acerca de la venida del Señor y nuestra reunión con Él, y es precisamente esta la razón por la que les escribo, o sea para que no sigan en este engaño del diablo. Sí, es importante servir al Señor con empeño pero al empeño debe seguir la conociencia para no crear confusión en los que escuchan y que quieren aprender, ya que «el afán sin conocimiento no vale nada» (Proverbios 19:2). El apóstol Pablo es muy claro y específico cuando escribe que la VENIDA DEL SEÑOR Y EL ARREBATAMIENTO (nuestra reunión con El) ocurrirán en el mismo día después de la tribulación de aquellos días. La Palabra es clara cómo el medio día en ese punto. Sigan leyendo 2 Tesalonicenses 2:1-3;8 y Mateo 24:29-31 hasta que no entiendan, y estudien también la Refutación del Rapto secreto del hermano Giacinto Butindaro (https://justojuicio.wordpress.com/2013/09/11/refutacion-del-rapto-secreto/) hasta que no estén SEGUROS de lo que está escrito, porque la Biblia NO PUEDE MENTIR.

Amados hermanos y hermanas, si les estoy diciendo esto no es para hacerles daño o para provocárles confusión, sino porque la Iglesia de Cristo no puede creer en cuentos de hadas, no puede tener una falsa esperanza en su corazón y no puede ser burlada por el diablo de está manera, esto es INACEPTABLE.

Estoy seguro de que si son sinceros y serán cuidadosos en el querer aprofundizar este asunto, se darán cuenta de que no existe algún rapto secreto antes de la tribulación, no existen dos venidas y tampoco Jesús puede regresar esta noche. La verdad les hará libres y se gozarán en gran manera porque no tendrán más dudas acerca de este tema debido a que el amor «no se goza de la injusticia, mas SE GOZA DE LA VERDAD» (1 Corintios 13:6).

Escudriñen, pues, lo que está escrito en la Palabra de Dios. No serán avergonzados jamás.

La gracia sea con todos los escogidos del Señor.

Enrico Maria Palumbo

¿Los principios de la Masonería son principios Cristianos?


libertad igualdad fraternidad masonicasHermanos y hermanas en el Señor, guárdense de todos aquellos que, aunque se digan Cristianos, promueven los principios de «LIBERTAD, IGUALDAD y FRATERNIDAD» porque son principios masónicos que nada tienen que ver con el verdadero Cristianismo. Los Masones, a través de estos principios, se han infiltrado en la gran mayoría de las Iglesias y denominaciones Cristianas para unir todas las religiones bajo el poder del Anticristo que vendrá. Lean este tratado del hermano Giacinto Butindaro para comprender el pensamiento masónico detrás del cual hay el diablo, y así guardar sus almas de las maquinaciones del enemigo.

«Para que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros; pues no ignoramos sus maquinaciones» (2 Corintios 2:11).

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Me ha sido necesario escribirles esta breve refutación, hermanos, porque me he dado cuenta de que muchos de los que se llaman Cristianos están convencidos de que los principios masónicos de «libertad, igualdad y fraternidad» – principios que les recuerdo fueron el lema de la Revolución Francesa, que en realidad fue organizada y dirigida casi en su totalidad por los afiliados a la masonería – son principios Cristianos. De ahí que, por lo tanto, su discurso que la Masonería es compatible con el Cristianismo, o que no es contraria al Cristianismo, porque sus principios son bíblicos. Razonamiento esto que ha persuadido a muchos.

Pero las cosas no son así en absoluto, porque a pesar de que la Biblia hable de libertad, igualdad y fraternidad, estas palabras tienen un significado totalmente diferente de lo que les atribuyen los masones.

Vamos a empezar de la libertad. ¿Qué dice la Escritura? “Donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad” (2 Corintios 3:17). ¿Pero dónde está el Espíritu del Señor? En los que se han arrepentido y creído en el Señor Jesucristo, y por lo tanto en los hijos de Dios, porque Pablo dice a los Gálatas: “Y por cuanto sois hijos, Dios envió a vuestros corazones el Espíritu de su Hijo, el cual clama: !!Abba, Padre!” (Gálatas 4:6). Así que los que creen en Jesucristo – es decir, que creen que Jesucristo es el Hijo de Dios muerto en la cruz por nuestros pecados y resucitado al tercer día para nuestra justificación – son hombres libres, y esto significa que están libres del pecado, como está escrito que Jesucristo “nos ha librado de nuestros pecados” (Apocalipsis 1:5 ‘NVI’), y también “Cristo nos hizo libres” (Gálatas 5:1). ¿No es Jesucristo mismo que dijo: “De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado. Y el esclavo no queda en la casa para siempre; el hijo sí queda para siempre. Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres” (Juan 8:34-36)? Esto es lo que quiere decir la Biblia cuando habla de libertad, la libertad de la esclavitud del pecado que han experimentado los que han creído en Jesucristo, que, sin embargo, no significa libertad de hacer ahora lo que uno quiere, porque el apóstol Pedro dice: “Porque esta es la voluntad de Dios: que haciendo bien, hagáis callar la ignorancia de los hombres insensatos; como libres, pero no como los que tienen la libertad como pretexto para hacer lo malo, sino como siervos de Dios” (1 Pedro 2:15-16), y Pablo le hace eco diciendo: “Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; solamente que no uséis la libertad como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros” (Gálatas 5:13). Y esto debido a que cada Cristiano es esclavo de Cristo (1 Corintios 7:22) y debe obedecer Sus mandamientos.

La Masonería rechaza todo esto, porque rechaza la obra de expiación cumplida por Jesucristo para libertarnos de nuestros pecados. Y, de hecho, la Masonería por ‘libertad’ da a entender la libertad para el hombre de hacer y creer lo que quiere, de modo que nadie tiene el derecho de interferir en las creencias o acciones de los demás, diciéndoles ‘están equivocados, por lo tanto, arrepiéntanse’. La Masonería, por lo tanto, a través de este principio alienta a los hombres para rechazar los mandamientos de Jesucristo, entre los cuales hay el de predicar a los hombres EL ARREPENTIMIENTO (Véase Lucas 24:47), palabra que significa ‘cambio de mente’. Si, de hecho, todas las personas son libres de creer y hacer lo que quieren (entonces son libres también de creer que Jesús no es el Cristo, que no murió por nuestros pecados y no resucitó para nuestra justificación; o de creer que la homosexualidad es completamente natural y legítima, y ​​así sucesivamente), yo no tengo el derecho de decirles que tienen que cambiar su forma de pensar: ¿No les parece? Y por supuesto, esta llamada libertad va de acuerdo con la tolerancia hacia todos los que enseñan cosas malignas y perversas antes los ojos de Dios, y de hecho, en la Masonería no hay oposición a las herejías, no hay refutación de ellas, porque creen que los que piensan de una manera diferente deban ser tolerados, y es precisamente por eso que la Masonería da la bienvenida a todos y tolera todo (tolerancia de la que se jacta); tolerancia que está sostenida también citando las palabras de Jesús: “No juzguéis” (que obviamente no tienen el significado que les atribuyen los masones) porque según los masones ‘la verdadera tolerancia consiste no sólo en el abstenerse de criticar las acciones y las creencias de las personas con las que no estamos de acuerdo; sino en el negarse a llegar a conclusiones que otros estén necesariamente en un error. La tolerancia es el rechazo a juzgar …. ‘. Está muy claro, entonces, que la libertad de la que habla la Masonería, es la libertad según la carne condenada por la Palabra de Dios, libertad que hoy en día es aprobada y defendida en muchas Iglesias a causa de hombres impíos que han entrado encubiertamente en medio de ellas, que no sólo afirman que los hombres son libres (teniendo el así llamado ‘libre albedrío’) para desobedecer a Dios creyendo y haciendo cosas malas y perversas, y que Dios respeta su libertad, y por lo tanto, no podemos predicarles que Dios les manda que se arrepientan y conviertan, de lo contrario irán a perdición; sino también sostienen más o menos explícitamente que un Cristiano es libre de pecar, porque Dios lo acepta así como es, entonces también aquí nadie tiene el derecho de juzgarle y reprenderle, más bien todos tienen el deber de tolerar el transgresor y la transgresión. De ahí entonces que el principio de la libertad, así como lo da a entender la Masonería, es bien aceptado por estas Iglesias conducidas por impostores.

Llegamos ahora al principio de igualdad. ¿Qué dice la Escritura? Que hay igualdad en la Iglesia de Dios, porque en Cristo no hay varón ni mujer, esclavo ni libre, Judío ni Griego, como está escrito: “Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús” (Gálatas 3:26-28). Así que antes de Dios los que han creído en Jesucristo son todos Sus hijos, ellos están en una posición de igualdad, ya que son hijos de Dios por la fe en Cristo, porque Él no hace acepción de personas. Nosotros los creyentes, por tanto, somos todos UNO en Cristo Jesús, y debido a que estamos en Cristo, estamos en la verdad, porque Jesucristo es LA VERDAD, mientras que los que no están en Cristo no están en la verdad.

Con la palabra igualdad, en cambio, los masones dan a entender que todos los hombres son igualmente sinceros y honestos al profesar su creencia, y por lo tanto, si otros tienen diferentes doctrinas de las de Cristo y de los apóstoles, también ellos tienen la verdad, ya que también ellos son igualmente inteligentes e igualmente bien informados. ¿Y quién soy yo entonces para interferir con las creencias de los demás? Sería un injusto y un presuntuoso si lo hiciera, y violaría el principio de igualdad¡¡ El principio masónico de la igualdad está estrechamente ligado al principio de la libertad según el cual cada uno es libre de creer lo que quiere y tiene el deber de no tratar de convencer al otro de que está en un error. Una vez más, la Masonería demuestra así que incita a la gente en contra de Cristo, como Jesús dijo que todo aquel que es de la verdad oye Su voz (Véase Juan 18:37), por lo tanto, todos aquellos que no escuchan Su voz están en la mentira, están bajo el poder de las tinieblas. Es por eso que no se puede poner todas las creencias sobre el mismo nivel, debido a que la única creencia verdadera es la del Cristiano, porque ha creído en Jesucristo, Aquel que es LA VERDAD (Véase Juan 14:6). Y por lo tanto no se puede poner a Jesús en el mismo nivel de Buda, Mahoma, y ​​otros personajes conocidos del pasado, como en cambio lo hace la Masonería precisamente en virtud del principio de la igualdad, porque Jesucristo es la verdad, así como el camino y la vida.

Y, por último, hablamos del principio de la fraternidad. Jesús dijo a sus discípulos: «Pero vosotros no queráis que os llamen Rabí; porque uno es vuestro Maestro, el Cristo, y todos vosotros sois hermanos» (Mateo 23:8). Así que entre los que creen en Jesús hay un vínculo de hermandad, y en virtud de eso se llaman unos a otros «hermanos». Todos ellos son hermanos porque son todos hijos de Dios por la fe en Jesucristo, según lo que dice Juan: “… a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios” (Juan 1:12-13), y Pablo a los creyentes de Galacia: “Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús” (Gálatas 3:26).

Con la palabra hermandad, en cambio, los masones dan a entender que todos los hombres son hijos de Dios y, por tanto, hermanos: no hay hijos del diablo entonces (también porque según los masones no existe un espíritu maligno llamado diablo). Una vez más, este principio va a contrastar la Palabra de Dios que dice que los hombres son por naturaleza hijos de ira, siendo esclavos del pecado y se convierten en hijos de Dios cuando creen en el Señor Jesucristo, y que habla de la existencia de los hijos del diablo que llama “cizaña” y que dice que en el final serán recogidos por los ángeles del Señor Jesús, y serán echados en el horno de fuego (Véase Mateo 13:36-42).

Como pueden ver, hermanos, los principios básicos de la Masonería se oponen a la verdad que está en Cristo Jesús, y por lo tanto, son inaceptables por parte de un Cristiano. Tienen que guardarse y luego apartarse de cualquier persona que se dice Cristiano y afirma que los principios masónicos de libertad, igualdad y fraternidad son principios que se encuentran en el Cristianismo y que, por lo tanto, la Masonería es compatible con el Cristianismo, porque quien habla de esa manera miente y quiere seducirles.

Quien tiene oídos para oír, oiga.

Por el maestro de la Palabra de Dios: Giacinto Butindaro

Traducido por Enrico Maria Palumbo

Una palabra de exhortación para los soldados de Cristo


armor-of-god«Ninguno que milita se enreda en los negocios de la vida, a fin de agradar a aquel que lo tomó por soldado» (2 Timoteo 2:4).

Tengo en mi corazón una palabra para ti, que eres un soldado alistado para la buena milicia por Cristo Jesús, para hacerte saber esto:

«Ya se impone la necesidad, a causa de los tiempos malos que corren, las cosas están precipitando bruscamente en el mundo y también en la Iglesia de Cristo, entonces, no hay tiempo para pensar mucho acerca de qué hacer, más bien hay que pelear la buena batalla de la fe (1 Timoteo 6:12), por la verdad con fuerza y pasión».

Habla, pues, no calles, mientras lo puedas hacer.

Es inútil que estudies la armadura espiritual que Dios ha prometido dar a sus hijos, si luego nunca vas a la batalla y siempre estás en silencio.

Tú sabes que hay un cielo que vencer, por lo tanto, debes saber que también hay una batalla en la que hay que participar activamente.

Ármate, pues, y desciende a la batalla junto a los ejércitos del Dios vivo y verdadero.

¿No oyes los insultos y las palabras vergonzosas y engañosas lanzadas contra Dios y Su pueblo por los muchos Goliat que hay hoy en día, tanto dentro como fuera de la Iglesia?

Si tú también las oyes, entonces haz como David, según la gracia que Dios te ha dado, desciende a la batalla, abre la boca para proclamar la verdad y lo que es justo, y tapa la boca a los habladores de vanidades y engañadores que han invadido las Iglesias de Cristo.

«Entonces el Señor dijo a Pablo en visión de noche: No temas, sino habla, y no calles; porque yo estoy contigo, y ninguno pondrá sobre ti la mano para hacerte mal, porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad» (Hechos 18:9-10).

Hay la buena milicia en curso, un pueblo de Dios prisionero que debe ser liberado de la seducción del maligno, y hay muchos que esperan por la redención del alma por medio del anuncio del Evangelio de Cristo.

¿No sientes en tu corazón para hablar en contra de las mentiras del pastor, los ancianos y las demás personas que hablan en contra de la sana doctrina presente en la Biblia? En tal caso pasa por alto, el cristianismo no es para ti, tal vez puedes suscribirte a un club, donde se mueven los peones sobre un tablero. La huerta, ¿has tratado de hacer la huerta? Trata de hacer la huerta, pero deja el cristianismo, porque se está desarrollando una guerra espiritual, donde se pierden y ganan almas.

Sólo si estás dispuesto a sufrir y luchar por la verdad puedes llamarte cristiano, o sea seguidor de Cristo, pero si no estás dispuesto a sufrir por el Señor, o haces muchos razonamientos artificiosos para adecuarte a todas las falsedades de los pastores y del mundo, entonces, no estás hecho para el cristianismo, no lo toques, no es algo para ti.

¿No te acuerdas de que están escritas estas palabras que Jesús dijo?

«Acordaos de la palabra que yo os he dicho: El siervo no es mayor que su señor. Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán» (Juan 15:20)

¿Te consideras un cristiano, pero no quieres ser perseguido, ni sufrir a causa de la verdad y de la Palabra de Dios? ¿Los sentimentalismos llevan la mejor parte en tu vida? Entonces no eres apto para el reino de Dios.

No puedes más esconderte, has sido salvado por Dios para luchar por la verdad y la Palabra de Dios, Jesús no murió para darte el lujo de calentar las sillas de la comunidad, para sonreír y decir siempre y sólo «Paz; Jesús te ama; Dios te bendiga…». Tú has sido salvado para proclamar estas palabras a los perdidos: “Arrepiéntanse y crean en el Evangelio», y a los creyentes rebeldes: «Arrepiéntete y abandona tu pecado, y Cristo te perdonará y te restablecerá en Su presencia».

Esto sólo como un ejemplo, pero se podrían decir muchas otras cosas similares.

Recuerda que fuiste comprado por precio, y ahora estás bajo el reino de Dios, y tienes que obedecer las leyes de Cristo, tú no eres un SIN LEY, libre de hacer lo que te plazcas. Ahora eres un esclavo de Cristo, por lo tanto, obedece a nuestro Señor Jesucristo, estudia las sagradas Escrituras, ora y trabaja para tapar las bocas de los muchos charlatanes y engañadores que circulan en este mundo.

Cristo Jesús y los apóstoles han luchado, han hablado, han defendido los mandamientos de Dios y Su Palabra. ¿Y tú?, en cambio, ¿Qué quieres hacer? ¿Todavía quieres callar? Oye, ya ha llegado el momento, si te mantienes silencioso, otros gritarán, pero cuando necesitarás algo de Dios, espera que Él no mire hacia otro lado, como tú lo estás haciendo ahora para no ver que se está haciendo una batalla épica por la verdad y la palabra de Dios.

Los cobardes no heredarán el reino de Dios, conócelo esto, porque está escrito, y no se puede ignorar:

«Pero los COBARDES e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda» (Apocalipsis 21:8)

No te pongas demasiado cómodo en el sofá viendo la televisión, no coloques demasiado bien tu toalla de playa, no te regodees demasiado sobre el hecho de que Dios es amor, porque Él es también justo y veraz, y no va a negar Sus propias palabras, y si Él ha dicho que los COBARDES tendrán su parte en la MUERTE SEGUNDA, que es el lago que arde con fuego y azufre, no sea que tú también estés entre ellos.

«Amados, por la gran solicitud que tenía de escribiros acerca de nuestra común salvación, me ha sido necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos» (Judas 3)

Por el hermano en Cristo Jesús: Giuseppe Piredda

Traducido por Enrico Maria Palumbo

¡Hay que orar de rodillas!


10339959_10204684903140742_42189436462374567_n«Cuando Daniel supo que el edicto había sido firmado, entró en su casa, y abiertas las ventanas de su cámara que daban hacia Jerusalén, se arrodillaba tres veces al día, y oraba y daba gracias delante de su Dios, como lo solía hacer antes» (Daniel 6:10).

«Venid, adoremos y postrémonos; arrodillémonos delante de Jehová nuestro Hacedor» (Salmo 95:6).

«Y él se apartó de ellos a distancia como de un tiro de piedra; y puesto de rodillas oró» (Lucas 22:41).

«Cuando hubo dicho estas cosas, se puso de rodillas, y oró con todos ellos» (Hechos 20:36).

Los profetas, Jesús y los apóstoles oraban de rodillas, y ya que estamos llamados a imitar a Jesús y los apóstoles, entonces también nosotros entre los santos debemos orar de rodillas. Un signo de humildad, de sumisión a Dios y de participación en la oración con todo su ser.

Cuando comencé a orar de rodillas en mi habitación, en la que nadie me veía, sino sólo Dios, comencé a experimentar la gloria de Dios, sus bendiciones espirituales y la comunión poderosa con el Espíritu Santo.

La carne y quienes quieren vivir carnalmente se oponen a estas cosas, y les molestan terriblemente, y encuentran mil excusas para no hacerlo. Pero si Jesús, los apóstoles y los profetas tenían la necesidad de orar de rodillas, ¿por qué no debería hacerlo yo? No tengo ninguna razón para no imitar a Jesús nuestro Señor y Salvador, entonces prefiero hacer mis oraciones más importantes de rodillas, y siempre hallo el bien.

Hermanos y hermanas en el Señor, sepan que si no oran de rodillas, no podrán tener una verdadera vida espiritual que agrada a Dios. Son todas palabrerías las que algunos hacen para no arrodillarse, y no pueden anular el hecho de que Jesús y los apóstoles oraban de rodillas.

Nadie les engañe con palabras vanas, aténganse estrechamente a todo lo que está escrito en la Palabra de Dios.

Por el hermano en Cristo Jesús: Giuseppe Piredda

Traducido por Enrico Maria Palumbo

 

 

Los Cristianos no son perfectos, sin embargo, deben buscar la perfección


Proverbios 4 18«Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, que va en aumento hasta que el día es perfecto» (Proverbios 4:18).

Todos nosotros los Cristianos, hijos de Dios nacidos de Dios, aunque fallemos muchas veces y no estemos exentos de cometer errores y pecados, hemos sido llamados a ser santos (Romanos 1:7), PERFECTOS como nuestro Padre que está en los cielos es perfecto (Mateo 5:48).

Y, de hecho, está escrito que hemos sido predestinados «para que fuesemos hechos conformes a la imagen de su Hijo» (Romanos 8:29), predestinados para ser como Cristo Jesús, es decir, imitadores de Él, imitadores de Aquel que es LO PERFECTO, el iniciador y perfeccionador de nuestra fe (Hebreos 12:1-2). El apóstol Pablo lo confirma cuando dice: «Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo» (1 Corintios 11:1).

Para que podamos perfeccionarnos, Dios nos ha provisto de algunas cosas entre las cuales hay la Palabra de Dios, debido a que «toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, A FIN DE QUE EL HOMBRE DE DIOS SEA PERFECTO, enteramente preparado para toda buena obra» (2 Timoteo 3:16-17); Sus ministros «A FIN DE PERFECCIONAR a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo, hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un VARÓN PERFECTO, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo» (Efesios 4:12-13) y las diversas pruebas en las cuales nos encontramos para que nuestra fe sea probada y produzca la paciencia que nos hace PERFECTOS y cabales, sin que nos falte cosa alguna (Santiago 1:2-4).

Por lo tanto, hermanos y hermanas en el Señor, no hagan caso de los que para justificar sus desobediencias les dicen: «pero nadie es perfecto, ustedes exageran» o «no existe la Iglesia perfecta» porque sí, es cierto que no existe un creyente perfecto y tampoco una Iglesia perfecta, sin embargo, existen creyentes e Iglesias fieles que buscan la perfección santificandose en el temor de Dios procurando observar todos Sus mandamientos y complacerLe en todo lo que hacen. Y Nosotros queremos estar entre esta clase de creyentes que no quieren agradar a los hombres sino a Dios, sólo a Dios. De esta manera, la gente del mundo y los creyentes rebeldes nos contrastarán porque su conciencia les reprenderá al ver nuestra manera de vivir, nuestra conducta que no se compromete con las costumbres y los hábitos del presente siglo malo. Sin embargo, la bendición y la paz de Cristo seguirán permaneciendo en nuestros corazones confirmándonos en toda buena obra porque Dios se complace en los que Le temen y que esperan en Su misericordia.

Acuérdense siempre que cuando nuestro Señor Jesucristo se manifestará, Le veremos tal como Él es y todo aquel que tiene esta esperanza en Él, SE PURIFICA a sí mismo, así como Él es puro (1 Juan 3:3).

«Así que, amados, puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu, PERFECCIONANDO LA SANTIDAD en el temor de Dios» (1 Corintios 7:1) porque Dios es el que en nosotros produce así el querer como el hacer, por Su buena voluntad (Filipenses 2:13).

«Por lo demás, hermanos, tened gozo, PERFECCIONAOS, consolaos, sed de un mismo sentir, y vivid en paz; y el Dios de paz y de amor estará con vosotros» (2 Corintios 13:11), y todas sus cosas sean hechas CON AMOR, que es el VÍNCULO PERFECTO (Colosenses 3:14).

A Aquel que es poderoso para guardarnós sin caída, y presentarnos sin mancha delante de Su gloria con gran alegría, al único y sabio Dios, nuestro Salvador, sea gloria y majestad, imperio y potencia, ahora y por todos los siglos. Amén.

Enrico Maria Palumbo